No permitas a otros hacer lo que a tí te toca, no creces, no maduras, no aprendes, no ganas. Jamás te sentirás orgulloso por tus logros, porque no fueron tuyos, jamás valorarás lo que adquieres porque no fue sudado. En fin, serás un miserable, sabiéndolo o no. La cantidad de lo que obtengas no importa, lo importante es que es tuyo, serás feliz. Recuerda, no es lo mismo que te apoyen, que te brinden palabras de aliento, que te acompañen, a que hagan lo que te toca hacer a tí. Se valiente. Si comenzaste, sigue. Si no has comenzado, qué esperas para hacerlo? Hoy es un nuevo día repleto de esperanza, como todos los días, porque la diferencia no viene de afuera, viene de tí... y yo creo en tí.

No hay comentarios:
Publicar un comentario