"Si los malos supieran qué buen negocio es ser bueno, serían buenos aunque sea por negocio"-. Facundo Cabral
He tenido la rara experiencia de ver con el tiempo a todos los que me han hecho daño recibir de alguna manera el fruto de lo que sembraron. Casi siempre les pasa algo peor a lo que me hicieron. También cuando la he hecho, tarde o temprano la he pagado con creces. Llámenlo karma (causa y efecto), Yin Yang, ley divina... Nosotros concluimos y coincidimos simplemente que la venganza es de Dios, tal y como lo señalan las escrituras. Dios no quiere que nos condenemos, así que en vida nos toca retribuir, purificar y pagar nuestras deudas. Si hos han hecho daño, no tomemos la justicia en nuestras manos, trabajemos el caso según nuestros estatutos sociales y encomendémosle nuestra situación a Dios, esperando siempre en fe...Tarde o temprano, nuestra fe será nuestra mayor venganza. (
Ver Salmo 34 al pie de éste artículo)
Anónimo:Todo cae por su propio peso.
Hebréos 10:30: Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza; yo daré lo merecido. Y también el Señor juzgará a su pueblo.
Deuteronomio 32:35: Mía es la VENGANZA
y la retribución; A su tiempo su pie resbalará, Porque el día de su
aflicción está cercano, Y lo que les está preparado se apresura.
1 Tesalonicenses 4:6: que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es
VENGADOR de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.
Romanos 12:19: No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la
VENGANZA, yo pagaré, dice el Señor.
Romanos 12:17: No paguéis a nadie
MAL POR MAL; procurad lo bueno delante de todos los hombres.
1 Tesalonicenses 5:15: Mirad que ninguno pague a otro
MAL POR MAL; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos.
1 Pedro 3:9: no devolviendo
MAL POR MAL, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.
Mateo 5:38:
Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os
digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en
la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a
pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que
te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida,
dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
1 Pedro 3:17: Porque mejor es que padezcáis haciendo el
BIEN, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal.
3 Juan 1:11: Amado, no imites lo
MALO, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; pero el que hace lo
MALO, no ha visto a Dios.
Tomado de: http://apologista.wordpress.com/2010/12/16/la-venganza-es-de-dios/... y otros lugares. :)
Salmo 34: La protección divina
1 Alabaré al Señor en todo tiempo;
a cada momento pronunciaré sus alabanzas.
2 Sólo en el Señor me jactaré;
que todos los indefensos cobren ánimo.
3 Vengan, hablemos de las grandezas del Señor;
exaltemos juntos su nombre.
4 Oré al Señor, y él me respondió;
me libró de todos mis temores.
5 Los que buscan su ayuda, estarán radiantes de alegría;
ninguna sombra de vergüenza les oscurecerá el rostro.
6 En mi desesperación oré, y el Señor me escuchó;
me salvó de todas mis dificultades.
7 Pues el ángel del Señor es un guardián;
rodea y defiende a todos los que le temen.
8 Prueben y vean que el Señor es bueno;
¡qué alegría para los que se refugian en él!
9 Teman al Señor, ustedes los de su pueblo santo,
pues los que le temen tendrán todo lo que necesitan.
10 Hasta los leones jóvenes y fuertes a veces pasan hambre,
pero a los que confían en el Señor no les faltará ningún bien.
11 Vengan, hijos míos, y escúchenme,
y les enseñaré a temer al Señor.
12 ¿Quieres vivir una vida
larga y próspera?
13 ¡Entonces refrena tu lengua de hablar el mal
y tus labios de decir mentiras!
14 Apártate del mal y haz el bien;
busca la paz y esfuérzate por mantenerla.
15 Los ojos del Señor están sobre los que hacen lo bueno;
sus oídos están abiertos a sus gritos de auxilio.
16 Pero el Señor aparta su rostro de los que hacen lo malo;
borrará todo recuerdo de ellos de la faz de la tierra.
17 El Señor oye a los suyos cuando claman a él por ayuda;
los rescata de todas sus dificultades.
18 El Señor está cerca de los que tienen quebrantado el corazón;
él rescata a los de espíritu destrozado.
19 La persona íntegra enfrenta muchas dificultades,
pero el Señor llega al rescate en cada ocasión.
20 Pues el Señor protege los huesos de los justos;
¡ni uno solo es quebrado!
21 Sin duda, la calamidad alcanzará a los perversos,
y los que odian a los justos serán castigados.
22 Pero el Señor redimirá a los que le sirven;
ninguno que se refugie en él será condenado.