Una familia judía de apellido Karnofsky, que emigró de Lituania a Estados Unidos, sintió compasión por un niño de color de 7 años y lo trajo a su casa en New Orleans. Allí se quedó y pasó la noche en esta casa de aquella familia judía, donde por primera vez en su vida fue tratado con bondad y ternura.
Cuando él se fue a la cama, la Sra. Karnofsky le cantó canciones de cuna rusas, que él después cantó con ella. Más tarde, aprendió a cantar y tocar varias canciones rusas y judías.
Con el tiempo, este niño se convirtió en el hijo adoptivo de esta familia. El Sr. Karnofsky le dio dinero para comprar su primer instrumento musical. Más tarde, cuando se convirtió en músico y compositor profesional, usó estas melodías judías como inspiración en composiciones como “St. Hospital James” y “Go Down Moses”.
El niño creció y escribió un libro sobre esta familia judía, que lo adoptó en 1907. Él orgullosamente hablaba yiddish con gran fluidez. En memoria de esta familia y hasta el final de su vida, usó la Estrella de David y dijo que en esta familia aprendió a ′′ vivir una vida real y con determinación ".
El nombre de ese niño era Louis Armstrong.
Todo lo que un niño necesita para convertirse en todo lo que debe ser es amor, atención y alguien que crea en su futuro.
Tomado de la red.
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