Incluso el pasado puede modificarse; los historiadores no paran de demostrarlo.
Cada hombre debe enfrentar su propio camino.
Felicidad no es hacer lo que uno quiere sino querer lo que uno hace.
Como todos los soñadores, confundí el desencanto con la verdad.
Haré el bien: todavía es la mejor manera de estar solo.
No perdamos nada de nuestro tiempo; quizá los hubo más bellos, pero este es el nuestro.
Hace falta un sol doble para alumbrar el fondo de la estupidez humana.
Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia.
Basta con que un hombre odie a otro para que el odio vaya corriendo hasta la humanidad entera.
Cuando los ricos se hacen la guerra, son los pobres los que mueren.
No se puede vencer el mal sino con otro mal.
Un hombre no es otra cosa que lo que hace de sí mismo.
Soñar en teoría, es vivir un poco, pero vivir soñando es no existir.
La fe, incluso la profunda, nunca es completa.
Nunca las noticias son malas para los elegidos de Dios.
Los cobardes son los que se cobijan bajo las normas.
El hombre está condenado a ser libre.
Al querer la libertad descubrimos que ella depende enteramente de la libertad de los demás.
Lo más aburrido del mal es que a uno lo acostumbra.
El hombre nace libre, responsable y sin excusas.
La libertad es lo que haces con lo que te han hecho.
Mi libertad se termina donde empieza la de los demás.
No puedo tomar mi libertad como fin sino tomando igualmente por fin la de los otros.
El mundo podría existir muy bien sin la literatura, e incluso mejor sin el hombre.
Todos los medios son buenos cuando son eficaces.
Es por el hombre que hay valores en el mundo.
La violencia se da siempre por una contra-violencia, es decir por una réplica a la violencia del otro.
La violencia es injusta según de dónde viene.
Nadie debe cometer la misma tontería dos veces, la elección es suficientemente amplía.
Un intelectual, para mí, es esto: Alguien fiel a un conjunto político y social, pero que no deja de cuestionarlo.
En amor, uno y uno son uno.
Ella no creía en nada; sólo su esceptisismo le impedía ser atea.
Cuando Dios se calla, uno puede hacerle decir lo que quiere.
El desorden es el mejor servidor del orden establecido.
No hay ricos malos. Hay ricos y eso es todo.
Jean Paul Sartre (1905 - 1980)
Filósofo, dramaturgo, novelista y periodista político francés, uno de los principales representantes del existencialismo. De padre militar naval que falleció a los pocos meses de su nacimiento, Jean Paul Sartre fue criado por su madre, Anne Marie Schweitzer, hermana de Albert Schweitzer y su abuelo. En 1915 ingresó en el liceo Henri IV de París y al año siguiente, debido al segundo matrimonio de su madre, se trasladó a La Rochelle, donde continuó sus estudios. En 1920, Jean Paul Sartre regresó a París e ingreso en la "École Normale Supérieure", donde conoció en 1929 a Simone de Beauvoir, su compañera de toda la vida. Se graduó en 1929 con un doctorado en filosofía y sirvió como conscripto en el Ejército Francés durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), durante la cual fue prisionero de los alemanes entre 1940 y 1941. Tras recuperar la libertad, Jean Paul Sartre volvió a Francia y comenzó a trabajar como profesor de filosofía en el liceo Condorcet y colaboró con Albert Camus en "Combat", el periódico de la Resistencia. En 1945 abandonó la enseñanza y fundó junto a Simone de Beauvoir la revista política y literaria "Les temps modernes", de la que fue editor jefe. Unos años después comienza a relacionarse activamente con el socialismo, siendo un severo crítico durante la Guerra Fría (1947-1991).
"Fue ante todo un hombre público; se mantuvo siempre en la brecha tomando posición ante los avatares políticos contemporáneos y teorizó el compromiso del intelectual con el mundo y la realidad. Pero si su aproximación al partido comunista concluyó abruptamente tras la represión de Budapest, como escritor con los años fue afinando un estilo exquisito... Fue profesor en El Havre y en París hasta 1945, fecha en la que renunció para consagrarse plenamente a liderar el movimiento existencialista", dice su biógrafo.
Jean Paul Sartre tuvo una relación fluctuante con el comunismo, acercándose y alejándose de él. Se opuso a la Guerra de Vietnam, y junto a Bertrand Russell y otros organizó un tribunal con el propósito de exhibir los crímenes de guerra de los Estados Unidos. En 1964 rechazó el Premio Nobel de Literatura, alegando que su aceptación implicaría perder su identidad de filósofo. Jean Paul Sartre fue una persona sencilla, sin apegarse mucho a las cosas materiales y con un gran compromiso social, siendo el paradigma del intelectual comprometido del siglo XX.
"Fue ante todo un hombre público; se mantuvo siempre en la brecha tomando posición ante los avatares políticos contemporáneos y teorizó el compromiso del intelectual con el mundo y la realidad. Pero si su aproximación al partido comunista concluyó abruptamente tras la represión de Budapest, como escritor con los años fue afinando un estilo exquisito... Fue profesor en El Havre y en París hasta 1945, fecha en la que renunció para consagrarse plenamente a liderar el movimiento existencialista", dice su biógrafo.
Jean Paul Sartre tuvo una relación fluctuante con el comunismo, acercándose y alejándose de él. Se opuso a la Guerra de Vietnam, y junto a Bertrand Russell y otros organizó un tribunal con el propósito de exhibir los crímenes de guerra de los Estados Unidos. En 1964 rechazó el Premio Nobel de Literatura, alegando que su aceptación implicaría perder su identidad de filósofo. Jean Paul Sartre fue una persona sencilla, sin apegarse mucho a las cosas materiales y con un gran compromiso social, siendo el paradigma del intelectual comprometido del siglo XX.
Tomado de:
http://www.frasesypensamientos.com.ar/autor/jean-paul-sartre_4.html
http://www.proverbia.net/citasautor.asp?autor=894
http://www.antroposmoderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=619
http://www.frasesypensamientos.com.ar/autor/jean-paul-sartre_4.html
http://www.proverbia.net/citasautor.asp?autor=894
http://www.antroposmoderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=619
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