Cómo es la vida del ser humano, una vida de libertad o de esclavitud. Curiosamente, ayer pasaba por un pasillo y leí un anuncio que decía "Libros libres". Mi primera reacción al leerlo fue "¿porque antes eran esclavos?". El joven que atendía el anaquel se rió y me dijo: "Así mismo, estaban encerrados en unas cajas en la Biblioteca. Ahora, los estamos regalando."
¡Qué interesante análisis! ¡Cómo unos libros que contienen el poder del conocimiento entre sus páginas son liberados! Muchos estudiantes se acercaron a leer los títulos y a seleccionar de acuerdo a su interés particular de lectura. Todavía se utilizan los textos tradicionales. Un Profesor encontró libros que no se publican electrónicamente y para su sorpresa allí estaban algunos pocos, entre esos anaqueles (Ese era yo, el del blog).
Parecía una fiesta, una celebración al conocimiento. Los que hemos leído muchos libros para completar nuestros estudios universitarios valoramos y entendemos cuan preciado puede ser el valor de un texto publicado. ¡Qué muchos saberes se comparten y llevan al análisis y reflexión de la vida del ser humano! Imaginaba esa libertad de conocimiento, al llegar a otras personas, abrazándose a un nuevo lector.
Los simbolismos eran elegantes, dinámicos y convergentes. Palabras compartidas, anécdotas del escritor, experiencias vividas. ¡Qué elocuencia de vocabulario se añadía al pensamiento del ávido lector! Como un relámpago a la distancia, recordé uno de los libros más leídos y menos comprendido. El libro de mayor misterio para algunos y para otros su revelación a una nueva experiencia de vida: La Santa Biblia.
Pensamientos vienen y van. Conocimientos adquiridos, palabras cuestionadas. El concepto de la fe y la vida eterna. "Escudriñemos nuestros caminos, y busquemos, y volvámonos a Jehova." - Lamentaciones 3:40
Reflexión de la Dra. Migdalia Rodríguez Vélez
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