
Ser como el río que fluye?
No, yo soy como el mar...
Fuerte, embravecido, valiente y corajudo
que me pico y estremezco junto a la tempestad.
El bañarte en mis costas te permito
también jugar con mis fuentes de coral
si decides más adentro a lo profundo
de mi esencia te puedo arrebatar.
Y no vuelvas si has probado de mis sales
y no sales si mi nácar vuelves tu manjar
si de mí se alimentan hasta las aves
con perlas y estrellas te voy combinar.
Tengo un pez con el que puedes volar alto.
Tengo varios con los que te puedo comer
Tengo bancos, mantas, rayas y dorados
tengo hasta caballos para cargarte cual bebé.
Si acaso dudas es mejor que ni lo intentes
si no lo intentas como habrás de saber?
nuestra historia comenzó con una serpiente
y luego Eva de Adán se dejó comer.
Repitamos la historia desde el principio
este cuento de nunca acabar
tú te zumbas, te me mojas un poquito
y entonces nos ponemos a jugar...
A la víbora, víbora de la mar.
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