Lo único que me duele de morir, es que no sea de amor. - Gabriel García Márquez
"Si un escritor se enamora de ti, encontrarás, entre otras cosas, tu collar de pequeñas cuentas colgado en el cuello de una mujer que espera el autobús. Encontrarás, por ejemplo, que tus zapatos favoritos han desaparecido y ahora alguien, una princesa en Cartago, una vendedora de hechizos en Gadir, no sé, alguien, los lleva puestos en un poema y los viste con la misma dulzura con la que los habrías de vestir tú. El reloj que siempre llevas, el reloj que tienes pero que nunca llevas, el hecho de que nunca hayas llevado un reloj, todo: de pronto serán hechos que pertenecen a la historia de alguna cortesana preciosa que nunca nadie ha llegado a conocer. Y que ahora eres tú. Y que más tarde seguirás siendo tú. Aunque no seas tú. Aunque se atuse el pelo como tú pero no tu pelo y respire hondo como tú pero no tu aire. Aunque lleve puestas tus mismas miradas y manías, use tus palabras y tus maneras. Ella, ellas, esas alumnas de Marte o de Alejandría, a veces protagonistas, otras narradoras, otras villanas, serán todas tú y no y bailarán al ritmo de tus canciones y no. Los libros serán espejos que no necesitan tenerte enfrente. Tú misma tratarás de verte en los poemas donde alguien lleva más o menos tu nombre o tiene más o menos tus gustos o más o menos ha hecho más o menos lo mismo, más o menos. Esos poemas y esas historias pertenecen al viento ¿a quién si no? Y son como el viento y nunca sabrás qué es lo que viene o qué es lo que se ha ido. Nunca sabrás si aparecerás en otras páginas que nunca llegarán a ti y, la verdad, no hay forma de saberlo. No hay forma de borrarlo. Incluso cuando te vayas seguirás ahí formando parte del mismo juego. Si un escritor se enamora de ti, tendrás la suerte o la desgracia de no morirte jamás."