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Saludos amigos del blog!!!! Quiero darles la bienvenida a mi humilde aposento cibernético con el cual comparto desde el año 2009 lo que me apasiona en el mundo de las artes, la historiografía, la música, la literatura y la espiritualidad. Y también escritos originales... Pueden accesar a mi música en Spotify, YouTube y a los interesados en mis publicaciones literarias, las pueden adquirir en su librería preferida en Puerto Rico, Amazon, eBay, o escribiéndome. Muchas bendiciones!

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lunes, 10 de noviembre de 2025

Mary Edwards Walker - Unica mujer en la historia en recibir la Medalla de Honor.

En 1917, el gobierno de Estados Unidos le pidió a una anciana de 84 años que devolviera su Medalla de Honor.
Ella respondió sin escribir una sola palabra.
Simplemente se la prendió al pecho y siguió usándola cada día hasta morir.
Su nombre era Dra. Mary Edwards Walker, y fue la única mujer en la historia en recibir la Medalla de Honor.
Nació en 1832, en una granja de Nueva York.
Sus padres, abolicionistas y reformadores, creían que sus hijas debían tener las mismas oportunidades que los hijos.
Su madre le enseñó que los corsés eran prisiones, y su padre le enseñó medicina.
Desde entonces, Mary decidió que no vestiría cadenas, ni en el cuerpo ni en la mente.
A los 21 años ingresó en la Facultad de Medicina de Syracuse, una hazaña insólita para una mujer en 1855.
Se graduó entre burlas y rechazo, y cuando intentó ejercer, los pacientes se negaron a ser atendidos por ella.
Fracasó su consulta, fracasó su matrimonio, pero nunca fracasó su voluntad.
En 1861, comenzó la Guerra Civil.
Mary se presentó como cirujana voluntaria del Ejército de la Unión.
El ejército la rechazó: las mujeres solo podían ser enfermeras.
Ella fue de todos modos.
Atendió heridos sin sueldo, bajo fuego enemigo, con sus propios instrumentos.
Curó, operó, salvó.
Finalmente fue reconocida como cirujana —la primera mujer en lograrlo—.
Fue capturada por los confederados mientras ayudaba a civiles en zona enemiga.
La acusaron de espía y pasó cuatro meses en la prisión de Castle Thunder, en condiciones inhumanas.
Cuando fue liberada en un intercambio de prisioneros, estaba débil, pero viva.
Y regresó al frente.
Por su valentía, el presidente Andrew Johnson le otorgó la Medalla de Honor en 1865.
Mary la llevó siempre, incluso cuando se la quisieron quitar.
Porque nunca la había recibido por complacer a nadie.
Después de la guerra, se convirtió en escritora, oradora y activista.
Luchó por el derecho al voto, por la igualdad de género, y por la libertad de vestirse sin miedo.
Fue arrestada varias veces por “usar ropa de hombre”.
Comparecía ante los jueces con sombrero de copa y su Medalla de Honor en la solapa.
En 1917, una revisión del Congreso revocó 911 medallas, entre ellas la suya.
“Solo para actos de combate”, dijeron.
Mary se negó a devolverla.
Siguió llevándola hasta su muerte, en 1919.
Cincuenta y ocho años después, el presidente Jimmy Carter revisó su caso.
En 1977, el gobierno devolvió oficialmente su Medalla de Honor.
Ella ya no estaba allí para verla.
Pero nunca la necesitó de vuelta.
Porque Mary Edwards Walker nunca dejó de tenerla.
La historia solo tardó medio siglo en entenderlo.
Fue la única mujer en recibir la Medalla de Honor.
Intentaron quitársela.
Se negó.
Y al final, tuvieron que admitir que tenía razón.
A veces, adelantarse a tu tiempo significa morir antes de que el mundo te alcance.
Pero cuando eso sucede…
la medalla sigue ahí, brillando justo donde siempre supiste que debía estar.
 
De la red... 

domingo, 9 de noviembre de 2025

Creer en la humanidad de todos modos...

 Durante el rodaje de *El Quinto Elemento* (1997), hubo un momento en que los colores estridentes, el caos neón y el humor sci-fi desbordado se desvanecieron — y lo que quedó fue algo inesperadamente vulnerable.

Ocurrió mientras filmaban una de las escenas más silenciosas de Leeloo — el instante en que observa imágenes de las guerras humanas y susurra: “¿Por qué… por qué vale la pena salvarlos?”

Milla Jovovich estaba sentada en el set, con la armadura futurista medio retirada, los ojos marcados por el cansancio tras horas de acrobacias y ensayos en lenguaje alienígena. El equipo esperaba otra toma excéntrica, otro estallido de la feroz inocencia de Leeloo. En cambio, la vieron temblar.

Luc Besson se acercó con suavidad.

—¿Demasiado intenso? —preguntó.

Jovovich negó con la cabeza.

—No… es que es real —susurró—. Ella está aprendiendo lo que los humanos se hacen entre sí. Y aún así tiene que amarlos.

Bruce Willis estaba cerca, en silencio. Había pasado gran parte del rodaje siendo el héroe imperturbable, la presencia serena en un mundo enloquecido. Pero en ese momento, al ver a Jovovich temblar, se arrodilló junto a ella y dijo en voz baja:

—Amar es difícil. Pero por eso importa.

Rodaron. Las lágrimas de Leeloo no eran lágrimas de película — cayeron lentas, pesadas, honestas. Willis no “actuó” frente a ella; simplemente escuchó, su expresión se suavizó, la arrogancia desapareció. Miembros del equipo dijeron después que fue el momento más humano en una película llena de explosiones, batallas operísticas y taxis flotantes.

Cuando terminó la toma, Jovovich exhaló temblorosa y murmuró:

—Salvar al mundo no es lo difícil. Creer que merece ser salvado —esa es la lucha.

Willis sonrió, con ternura — no como Korben Dallas, ni como estrella de acción, sino como un hombre que entendía la esperanza cansada.

—Nos salvamos unos a otros. Un momento a la vez.

Ese día, *El Quinto Elemento* dejó de ser ciencia ficción salvaje o espectáculo de cómic.

Se convirtió en una historia sobre la bondad frágil, sobre elegir el amor en un mundo que a menudo lo olvida — y sobre cómo, a veces, lo más valiente que puede hacer un héroe… es creer en la humanidad de todos modos.

De la red...

viernes, 7 de noviembre de 2025

Eratóstenes y la circunferencia de la Tierra.

 

Hace más de 2000 años, un hombre midió la Tierra con un palo y una sombra
Eratóstenes, un sabio griego nacido en el siglo III a. C., realizó uno de los cálculos más asombrosos de la historia. Con un método tan simple como brillante, determinó la circunferencia de la Tierra con una precisión sorprendente.
Sabía que en Siena (actual Asuán, Egipto), durante el solsticio de verano, el Sol no proyectaba sombra al mediodía, mientras que en Alejandría sí lo hacía. Midiendo el ángulo de esa sombra (7,2°) y conociendo la distancia entre ambas ciudades, dedujo que la Tierra debía medir unos 40 000 km.
Todo esto lo logró más de dos milenios antes de los satélites, GPS o computadoras. Su experimento no solo confirmó que la Tierra es esférica, sino que también demostró el poder del ingenio humano para comprender el mundo con herramientas simples.
 
De la red... 

Sobre búsquedas...

 El que no busca encuentra, mientras el que busca no encuentra, aunque tenga la respuesta de frente. - CP


El problema con algunas personas es que buscan a álguien que les resuelva la vida, mientras otros solo buscan álguien para compartirla. - CP

 Hubo un hombre que salió a buscarse, una vez se halló, volvió donde comenzó. Halló la riqueza en su origen, pero para reconocerla, primero tuvo que andar todo un mundo. - CP 

miércoles, 5 de noviembre de 2025

Alfred “Butch” Lee Jr.: El Pionero de Santurce

El Primer Puertorriqueño en la NBA, Construyendo un Legado Más Allá del Baloncesto.
 
Alfred “Butch” Lee Jr. siempre será recordado como El Primero — el primer Puertorriqueño, y el primer Latino, en jugar y ganar en la NBA. Nacido en Santurce y criado en Nueva York, su trayectoria desde las canchas del Bronx hasta la historia de la NBA es una historia de brillantez, disciplina y profundo amor por su patria.
 
Chispa Temprana y Gloria Universitaria
En la escuela DeWitt Clinton, su talento lo llevó a una beca en la Universidad de Marquette (1974–1978). Allí se convirtió en una leyenda nacional, liderando a los Marquette Warriors al Campeonato de la NCAA en 1977, donde fue nombrado Jugador Más Destacado del Torneo Final Four. Su camiseta número 15 fue retirada, inmortalizando su legado.
 
“El Primero” —
Un Pionero Puertorriqueño
 
Lee rompió barreras al ingresar a la NBA, llevando el orgullo Boricua en cada paso. Su rol histórico como el primer Puertorriqueño y primer Latino en jugar y ganar en la liga abrió las puertas a generaciones futuras de atletas de color. Su determinación y orgullo se convirtieron en símbolo de la excelencia Boricua en el mundo.
 
Espíritu Empresarial y Compromiso Filantrópico
Tras su carrera profesional, Lee regresó a su isla — no para retirarse, sino para invertir en ella. Fundó Butch Lee Sports Marketing y la Butch Lee Basketball Academy en Guaynabo, formando jóvenes atletas y líderes. Además, su filantropía ha apoyado programas comunitarios y esfuerzos de recuperación tras huracanes, ayudando a levantar a Puerto Rico desde adentro.
 
Un Legado Más Allá del Juego
La historia de Butch Lee no trata solo de baloncesto — trata de identidad, orgullo y retribución. De Santurce a la NBA y de regreso a Puerto Rico, encarna el espíritu indomable del pueblo: resiliente, visionario e imparable. Cada joven Boricua que sueña con grandeza lleva dentro el eco de El Primero.
 
De la red... 

sábado, 1 de noviembre de 2025

Eddie's "brown sound"...

 
Eddie Van Halen lied for years about how he got his tone - to help out a guy who didn't actually do anything.
 
From the moment Van Halen's debut album hit in 1978, guitarists became obsessed with Eddie's sound. It was big and round, with rich liquid textures like Clapton's Gibson SG tone, but with extra bite. Sharp clarity during rapid passages, majestic when needed. Nobody had heard anything like it.
 
They called it the "brown sound."
 
Other guitarists needed to know how he did it. On the first Van Halen tour, rival players would sneak onto the stage after soundcheck, hunting for the magic box - some hidden piece of equipment that produced that tone. They'd study Eddie's pedalboard, looking for the secret weapon.
 
Ted Nugent was once caught playing Eddie's rig and pedals backstage. He plugged in, turned it up, played. He just sounded like himself.
 
The gear wasn't the answer.
 
For years, Eddie told anyone who asked that amp repairman Jose Arredondo had modified his Marshall amplifier - special tweaks that created the brown sound. It became part of the legend. Jose even made money performing similar modifications for other guitarists chasing Eddie's tone.
 
The truth was simpler and stranger.
 
Jose only did maintenance work. He re-tubed Eddie's Marshalls and set the bias. That was it. The amp Eddie used on the first six Van Halen albums was stock - a 1968 Marshall 100-watt Super Lead plexi, completely unmodified.
 
Eddie later admitted he'd lied "to throw him a bone and help him out." Jose was a good guy, and Eddie figured the story would send business his way.
 
The actual secret? Eddie turned every knob on the Marshall all the way up, plugged in, and played. That was it. Well, almost.
 
The Variac was the real trick - a variable transformer that let Eddie drop the voltage to about 89 volts. This allowed him to crank the Marshall without blowing it up or melting the tubes. He could get that saturated, singing distortion at controllable volumes. But the Variac didn't create the tone. It just kept the amp from destroying itself while Eddie got the tone he wanted.
 
Producer Ted Templeman confirmed it: "I put the right microphone in front of the right speaker and stood back. It's really all Ed."
 
The brown sound came from Eddie's hands. His technique. The way he attacked the strings. Engineer Donn Landee's reverb added the concert hall vibe, but the core of the sound was just Eddie playing a cranked Marshall through his Frankenstein guitar.
 
Guitarists tore apart their rigs looking for the answer. They paid Jose Arredondo to modify their amps. They bought the same gear, the same pedals. And they still couldn't get it.
 
Because Eddie had sent them all looking in the wrong place - to protect a secret that wasn't really a secret at all.
 
From the net... 

jueves, 30 de octubre de 2025

Canta, aunque duela...

Bob Marley dijo una vez:
«Fui rechazado porque era pobre y mestizo. No era de aquí ni de allá.
Pero el reggae me dijo: canta, aunque duela.
Me dispararon porque quería la paz… y aun con mis heridas abiertas, subí al escenario.
Porque mi voz no era solo mía, pertenecía al pueblo.
La música no es la gloria, es una misión.
Y elegí usarla para sanar, para unir, para amar.»
(Si tu voz puede elevar a los demás, no te quedes en silencio.
Aunque tu cuerpo tiemble, canta más fuerte.)
 
De la red... 

domingo, 26 de octubre de 2025

Sócrates y la ilusión de crear

 

Un joven detuvo a Sócrates en una calle de Atenas y le preguntó:
—¿Por qué el ser humano puede destruir la vida, pero no crearla?
El filósofo señaló una estatua rota junto al camino y respondió:
—Destruir es fácil. Cualquier necio puede blandir un martillo. Lo difícil es comprender la forma que se pierde cuando la golpeas.
Luego añadió:
—Ni siquiera el escultor crea la piedra. Solo ordena lo que ya existe. Nosotros no hacemos la materia: la movemos.
“Podemos copiar la vida, ensamblarla, imitarla... pero no podemos soplar el aliento en el polvo. No conocemos el patrón original.”
Y mirando al joven, concluyó:
—El poder de destruir no es grandeza, es ignorancia.
A veces el ser humano confunde la fuerza con la creación.
Pero lo que nos hace divinos no es romper, sino comprender lo que no sabemos hacer.
 
De la red...